diumenge, 16 de novembre del 2014

dieciséis.

Creo que si no escribo esto, reventaré.

¿Que poder igualitario nos da la muerte, no? Seamos guapos, feos, ricos, pobres, gordos, flacos, famosos o completos desconocidos, moriremos igual. De una manera o otra, desafiandola, o dejandola que llegue a su devido tiempo, pero llega.

Y que golpe tan duro te dá, madre. 

Nunca podremos explicar la muerte des de un punto de vista personal, pero si como la sentimos en otra persona, animal, o lo que sea.

Des de mi punto de vista hay muertes de dos tipos. Sentimentales o psicologicas y fisicas.

-Sentimentales: Cuando ya muere ese sentimiento por alguien (amor, amistad, o lo que sea. También odio, evidentemente). A veces nos provocan un especie de alivio, por ese ''algo'' que llevaba tanto tiempo en nuestra cabeza, pero también dolor. Estas dejando atrás una época de tu vida, una cosa que has llevado contigo un tiempo, y ahora sacarás de tu mochila.
-Fisicas: Las peores de todas, las totales, las definitivas. No volveremos a ver a esa persona, no sabremos nada más de ella, y únicamente nos quedará el recuerdo (bueno o malo) de ella. Los momentos compartidos a su lado, y bueno, para que mentirnos, el llanto indefinido. No sabremos hasta cuando, pero algun día se apaga. Y queda el recuerdo. Un angel, una mariposa, la estrella que más brilla o simplemente, una foto.


Pero... si nos paramos a pensar, hablamos demasiado de ella. ¿Y por qué será? 
Sabemos que está allí, que al fin y al cabo, es el final de nuestro camino. Que para muchos es su gran logro, y para muchos otros, su gran miedo.

Personalmente, no me gusta que la gente hable de muerte. O que simplemente hagan broma con ella.  Y creo que en estos temas, la televisión, ya sea informando o con series y peliculas, ha hecho mucho ''daño''. Escuchamos muerte, suicidio, asesinato.. las 24h de día. Es como una moda que nunca acaba. Como la solución para todo. Y no! No es así.

Nos alimentamos de muerte, y no nos paramos ni a pensar en lo que eso implica.

Aprendí a valorar la vida, y tengo que decir, os guste o no, que no la echaré a perder. Sé que el momento llegará, no sé cuando, por qué y miles de preguntas más, pero así será. Y no me agobiaré pensando en ello, simplemente disfrutaré (como pueda, y de la mejor manera posible), hasta que me pille. 

Por último añadiré: creemos en demasiadas cosas para no creer en la muerte. Ya sea religioso, o simplemente cosas del día a día. Entonces, ¿será que no la queremos tanto, no?

16 del once de 2014. Hoy la vida me ha dado dos lecciones por diversas razones. Una de ellas, disfrutar hasta el final y la segunda, luchar. Luchar y luchar. Aunque no haya posibilidades, aunque esté todo perdido. Sea para lo que sea, constextualizado donde quieras. Pero disfruta y lucha. Y por último, otra, que se me acaba de ocurrir ahora. De nada sirve ser como quieres que sean, ser algo que no te gusta, o decir lo que quieren que escuches. Sé tu mismo, dí lo que piensas, y sé feliz a tu manera, porque esa es la única importante. La única satisfactoria para tí.

Podría hacer alguna que otra citación de alguna novela, pero ahora mismo, no me sale.

Descansa en paz.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada